Prepara tu cazoleta tipo Phunnel en 5 sencillos pasos
¿Te has preguntado alguna vez cómo preparar correctamente una cazoleta tipo phunnel y cargar el tabaco en este tipo de cazoletas? Hoy te traemos otro tutorial para ayudarte a obtener el máximo provecho de tu cachimba y conseguir fumadas óptimas. Aprende a utilizar no solo la cachimba en sí, sino también todos los complementos y accesorios que la completan.
¿Qué es una cazoleta phunnel?
Si hasta ahora has estado utilizando la cazoleta egipcia de porcelana que venía con tu cachimba, te has estado perdiendo la oportunidad de experimentar con cazoletas hechas a mano que ofrecen una experiencia de fumado mucho mejor. Las cazoletas tipo phunnel son una de esas opciones y se han vuelto muy populares en los últimos años debido al tabaco que se utiliza hoy en día, que suele venir empapado en melaza.
La principal diferencia entre las cazoletas phunnel y las egipcias es la forma en que el flujo de aire interactúa con el tabaco. Las cazoletas phunnel tienen un vórtice central y el tabaco se carga en el depósito que lo rodea. Esto permite que la cazoleta cocine y recueza el tabaco en su propia melaza, lo que resulta en una fumada más suave y sabrosa. Las cazoletas egipcias, por otro lado, tienen un flujo vertical de aire y no permiten la recocción del tabaco.
Si quieres mejorar tu experiencia de fumado, considera probar las cazoletas tipo phunnel y experimenta con diferentes técnicas de carga y gestión de calor para encontrar la combinación perfecta que se adapte a tus gustos y necesidades.
Pasos a preparar para una cazoleta tipo Phunnel
Preparar una cazoleta es un proceso que requiere de algunos conocimientos y pasos específicos para obtener una fumada óptima. No se trata solo de elegir un buen tabaco o proporcionar el calor adecuado, sino también de seguir un proceso específico para preparar una cazoleta phunnel correctamente. Algunos de los pasos necesarios pueden incluir:
1. Elegir nuestra cazoleta preferida
Es cierto que cuando se trata de elegir una cazoleta para nuestra cachimba, es normal que tengamos nuestras marcas favoritas. Sin embargo, a la hora de tomar una decisión de compra, el tipo de material utilizado para la fabricación de la cazoleta es un factor clave que debe ser considerado cuidadosamente.
El material de la cazoleta que se use para preparar el tabaco afectará significativamente la forma en que el tabaco se calienta y la forma en que lo disfrutamos. Por ejemplo, las cazoletas de arcilla blanca con chamote son una opción popular para aquellos que buscan una experiencia de fumado uniforme y prolongada. Este tipo de cazoleta refractaria permite una distribución uniforme del calor, lo que maximiza el rendimiento del tabaco y hace posible sesiones más largas y gratificantes con nuestra cachimba.
Es importante tener en cuenta que el material de la cazoleta también puede afectar el sabor y la calidad del humo producido. Algunos materiales son más porosos que otros, lo que puede permitir una mayor absorción de la melaza y, por lo tanto, mejorar la calidad de la fumada. Por otro lado, ciertos materiales pueden proporcionar una experiencia más suave y ligera en el paladar, mientras que otros pueden intensificar los sabores y generar una mayor cantidad de humo.
2. Cargar el tabaco o fumable en la cazoleta
Uno de los errores más comunes que cometen los usuarios inexpertos es no tratar correctamente el tabaco antes de usarlo.
Es fundamental que desmenucemos bien las hierbas o tabacos antes de colocarlos en la cazoleta. No solo vamos a oxigenar el tabaco, sino que, aunque penséis lo contrario, también vamos a aprovechar la cantidad que depositemos, evitando un gasto innecesario al aplastarlo.
Tenemos varias formas de “desmigar” el tabaco, ya sea desmenuzándolo con los dedos o utilizando un tenedor sobre una base rígida.
Según vayáis cogiendo experiencia, os daréis cuenta de que la marca del fumable que vayáis a utilizar juega un papel importante a la hora de decidir qué cantidad depositar en la cazoleta.
Existen marcas de fumables que resisten mejor el calor, y podemos jugar con el grado de apelmazamiento según nuestro gusto, e incluso si debemos rebajarlo a ras del borde para evitar que se queme en demasía. El factor más importante a la hora de tratar el tabaco en nuestra cazoleta Phunnel es el de controlar la manera en que se calienta el tabaco. Debemos tener en cuenta que queremos que el tabaco se cueza, y no que se queme.
Por eso, si lo aplastamos, corremos el riesgo de que la parte superior se queme más rápidamente, evitando que el calor penetre hacia la parte inferior de la cazoleta. Será entonces cuando tendremos ese sabor a quemado tan desagradable desde el primer momento.
Por tanto, independientemente del tipo de cazoleta que utilicemos, debemos seguir un paso básico: desmenuzar perfectamente todo el tabaco por nuestra cazoleta Phunnel, hasta que nos queden unos 2 o 3 mm del borde. Evita a toda costa que el tabaco toque el papel de aluminio o el gestor de calor.
3. Colocar y tensar el papel de plata para cachimba
Si eres nuevo en el mundo de la cachimba, es posible que utilices el papel de aluminio común que se encuentra en la cocina. Sin embargo, existen papeles de aluminio especiales para usar en las cazoletas. Una buena opción es el Super Foil, que tiene un grosor de 40 micras, lo que lo hace resistente al calor y a la tensión. Para evitar la sensación de vacío al inhalar, puedes colocar un clip o algo similar en el agujero central de la cazoleta y usar una doble capa de papel de aluminio.

4. Hacer los agujeros en el papel de plata
Los agujeros en el papel de plata deben estar perforados de manera correcta para permitir que el oxígeno pase al interior de la cazoleta y evitar fumadas con baja calidad. Para perforar el papel, se recomienda utilizar un punzón afilado en lugar de una aguja o chincheta. La circunferencia del tabaco debe estar completamente agujereada y un tamaño pequeño de agujeros distribuidos correctamente proporciona una combustión óptima y evita que la ceniza de los carbones caiga sobre el tabaco. El punzón debe estar bien afilado para evitar que el papel de plata se destense y se recomienda tensar el papel una vez realizados los agujeros para evitar que el carbón toque el tabaco.
5. Colocar los carbones
Es altamente recomendable evitar el uso de carbón autoencendido para encender la shisha, no solo porque no es un carbón natural, sino porque no aprovecharás todo el sabor y potencial de tu tabaco.
Antes de preparar la cazoleta y el fumable, te sugerimos encender los carbones naturales en un hornillo eléctrico en casa o en uno de gas para salidas al aire libre. Una vez encendidos, coloca los carbones al rojo vivo en la parte externa de la cazoleta. A medida que pase el tiempo y la shisha vaya perdiendo intensidad, es el momento de soplar y rotar los carbones. Para repartir el calor de manera uniforme y proporcionar más calor a las zonas que lo necesiten.
¡No te olvides disfrutar!
El objetivo principal de seguir los pasos de preparación de la cachimba es disfrutar del sabor de nuestros fumables. Ya sea solos o en compañía de amigos. Para lograrlo, es importante jugar con la intensidad del calor que proporcionamos a la cazoleta Phunnel. De manera que evitemos concentraciones excesivas de calor en algunas zonas que puedan causar irritación. Si esto ocurre, es recomendable utilizar la purga de la cachimba con mayor frecuencia para renovar el humo de la base y mejorar el sabor. Sin embargo, es importante tener precaución al hacerlo, especialmente si se tiene una cachimba pequeña, ya que soplar con demasiada fuerza.
Puede hacer que el agua suba por el tubo de inmersión y moje el tabaco y el carbón, lo que obligaría a empezar de nuevo. Si has seguido estos pasos o si has encontrado algún problema al preparar tu cazoleta Phunnel. Te invitamos a compartir tus comentarios y experiencias en la sección de comentarios para ayudar a otros usuarios que también disfrutan de su cachimba.